Lentes de contacto (Contactología)

Contactología

Nuestro centro se dedica a realizar adaptaciones de todo tipo de lentes de contacto. Estamos especializados en la adaptación de lentes de contacto semirrígidas o permeables al gas.

Para determinar la lente más adecuada a cada paciente es necesario hacer una Adaptación personalizada. En este estudio se toman medidas de la córnea tanto de su curvatura como de su diámetro, se realiza un examen visual y además se hace una exploración de la parte externa del ojo valorando cualquier problema de sequedad, calidad de la lágrima o posibles problemas oculares, que puedan condicionar el uso de la lente o determinar qué tipo de lente será la más adecuada.

Existen diferentes tipos de lentes:

Blandas: Para corregir la miopía, la hipermetropía, el astigmatismo y la vista cansada. La variedad que existe de lentes de contacto es muy amplia y cada una puede ser idónea para cada caso en particular. Pueden ser desechables diarias, mensuales o anuales. Y también disponemos de lentes especiales para ojos con poca lágrima.

Semirrígidas: Proporcionan una mayor calidad visual. Asféricas, progresivas, tóricas, semiesclerales, esclerales…

Ortoqueratología nocturna: Consiste en reducir de manera temporal y reversible la miopía mediante el uso nocturno de unas lentes semirrígidas de geometría especial. Las lentes realizan una redistribución controlada de la porción superficial del epitelio de la córnea. Las modificaciones que se producen en la córnea no son permanentes, sino que al suspender el tratamiento la córnea vuelve a su estado original. Es el mejor tratamiento para ralentizar el progreso de la miopía en niños. Actualmente existen lentes de Ortoqueratología nocturna que consiguen reducir un gran número de dioptrías. Y ahora además también para hipermetropía. ¡Olvídate de las gafas!

La limpieza y desinfección de las lentes de contacto

Un incorrecto mantenimiento de las lentes de contacto multiplica exponencialmente el riesgo de sufrir incomodidad, irritación e infecciones en el ojo que pueden provocar un deterioro visual.

No es lo mismo limpiar que desinfectar.

Tanto si las lentes son de reemplazo mensual como anual debemos desinfectarlas adecuadamente. Para ello disponemos de líquidos que tienen como base el peróxido de hidrógeno o el alcohol isopropílico. Las soluciones únicas limpian la lente, siempre que se frote, pero no tienen ese poder desinfectante que poseen estos líquidos.

Es importante cuidar nuestras lentes de contacto para desinfectarlas y eliminar los restos de depósitos, lípidos, conservantes y otras moléculas que quedan en la superficie y pueden provocar molestias en nuestros ojos.

Para evitar el riesgo de contaminación de las lentes debemos tener en cuenta los siguientes cuidados:

  • Lavarse las manos con agua y jabón y secarlas cuando manipulemos las lentes.
  • No usar agua del grifo para el aclarado de cualquier tipo de lentes.
  • No alargar el tiempo de uso más allá del recomendado: no más de un día en caso de lentes diarias, no más de 30 días en el caso de lentes mensuales o no más de un año en lentes de reemplazo anual.
  • No usar las soluciones de mantenimiento fuera del tiempo establecido por el laboratorio. Y mantener el envase cerrado después de su uso.
  • Reemplazar el portalentes cada 2 o 3 meses y mantenerlo limpio a diario. Ya que se acumulan hongos y bacterias que pueden causar conjuntivitis importantes.
  • No dormir con las lentes de contacto, excepto en el caso de lentes de ortoqueratología nocturna que están fabricadas para ello.

Ante cualquier duda que tengas con el mantemiento de tus lentes puedes visitarnos y te recomendaremos la limpieza más adecuada en tu caso.